sábado, 3 de junio de 2017

La respuesta a la vida, al universo y a todo.

Permitidme que os haga una breve reflexión. 
El universo es infinito, ¿no?, y, como infinito, imaginamos algo tan sumamente gigantesco y exageradamente grande como la distancia que hay entre dos números, por ejemplo el 1 y el 2. 
Infinita. 
Es difícil poder imaginarse algo tan terroríficamente inmenso, podría decirse que hasta es imposible para la forma de vida dominante y descendiente de los simios de un pequeño planeta llamado Tierra. Aunque Tierra es sólo el nombre que le dan en algunos lugares de tal planeta, ni ellos han sabido ponerse de acuerdo. 
Pues bien, si bien es cierto que el término infinito es aplicable al universo, también es cierto que el término finito debería ser aplicable al número de planetas en los que hay vida en él, pues es reconocido en la literatura universal que no todos los planetas poseen vida en ellos. 
Por lo tanto y reiterándome con el fin de dejarlo claro, el universo cuenta con un número finito de planetas con vida. 
Es por ello que en ciertos libros y revistas publicados 4 años plutonianos después del fin del universo (cuya descripción la abordaremos en otra ocasión) se postula que en realidad la vida es algo tan improbable y desdeñable que no incurriríamos en error al afirmar que pueda ser un simple error de programa, o incluso que ni que exista, dado que algo finito contenido en algo infinito es prácticamente muy poquita cosa. 
Debido a ello, cada vez que tiendo la ropa y llueve, simplemente respiro, recuerdo la importancia de la vida, y rápidamente se me pasa el estrés que me produce la estúpida relación que tienen el tiempo meteorológico y mi maldita lavadora.

KH

miércoles, 29 de junio de 2016

Así de jodido y seguro

El amor es lo único de este mundo
que es completamente seguro.

Si lo pillas, no lo dudas,
no haces balances,
simplemente se te va la puta cabeza.

Es una sífilis de prostíbulo,
un cáncer de alma,
un bisturí que no corta,
unos 7gr de paracetamol,
una pastilla de cianuro en el tercer molar.

Así de jodido y seguro es el amor.

Puto Cupido

Una flecha sin punta de Cupido.

Un mar duro y desagradecido
que rompe y rasga mis alas negras
que creí poder darte sin querer.

Un lunes sin fin,
que pretende pero no hace,
que ilusiona pero no pasa,

que da esperanzas de un fin de semana
en el que me dejes tenerte,

y dehacerte,
y susurrarte,
y hacernos.

No hay peor sentimiento que este,
que el desamor que tú me das
o al menos el que yo recibo.

Nuestros fallos

Tuve fallos
y sé cuáles fueron
y sé por qué no estás.

Tuviste fallos
y no supe cuáles fueron
y sigo sin saberlos.

La vida nos jodió
juntándonos tan tiernos;
a ti te hizo maduro 
y a mi me convirtió
en este Peter Pan
que cree saber 
lo que sabe y lo que no
pero que,

en realidad, 

sigue sin explicarse
por qué aún te sueña.

Las ganas que te tuve

Déjame decirte
las ganas que te tuve,

las noches que te soñé
y los corazones que robé
buscando tu color
por antros y bares
que sólo servían
copas rotas y,

algunas veces,

ese tono parecido a ti
que me hacía volverme 
y me recordaba que tú,

ya sin mi.

KH

sábado, 20 de febrero de 2016

Pero luego respiro y se me pasa...



Desde que nos dimos cuenta de que usábamos la misma talla de pantalón

empezamos a tejernos cinturones de besos

y ahora que lo que se llevan son los tirantes

solo me queda un calcetín puesto

con el que colar las emociones

y dejar solo lo bueno,

quitando lo hueco que amarga

y decirte un último te quiero

que destroce tus estúpidas batallas

mientras me agobio y, no se, friego algo,

empano algo,

quiero a mi gato,

salgo a pasear,

miro la ropa tendida,

escribo cosas.

Porque a veces pienso que me muero, pero luego respiro y se me pasa.

domingo, 30 de agosto de 2015

Aunque no deje de llover.

Un día firmamos todo.
Ahora toca recordar
y así, de ese modo,
volver atrás y retomar
el mundo justo en el lugar
donde nos obligó a bajar.

Dulce y amarga locura
que ansia y estremece
cada parte de mi ser 
cuando mi atolondrada mente
se piensa ante ti
volando, como antes,
aunque no deje de llover.